La inclusión en actividades sociales para todas las personas es fundamental en la etapa de la adolescencia, ya que ayuda al desarrollo psicomotriz, refuerza la cooperación, y la sensación de pertenencia al grupo de iguales.
El ocio es una herramienta vital para la autonomía del adolescente, y en el caso de las personas con discapacidad no es diferente. Desde el hecho de prepararse su mochila para el entrenamiento/actividad, utilizar transportes públicos para llegar a dicha actividad, las relaciones con sus compañeros/as y con su monitor/a. De esta manera las actividades de ocio no solo ayuda a la autonomía sino que también refuerzan diferentes valores como la cooperación y el respeto a sus iguales.
Con la intención de que las actividades que se desarrollen en los entornos más cercanos de los/las jóvenes con diversidad funcional sean inclusivos y con la intención de sensibilizar tanto a los jóvenes que acuden, como a los profesionales que trabajan en estos espacios es que nace esta iniciativa. Centrándose principalmente en las actividades que ya se realizan cerca de los lugares de residencia de las/los adolescentes o en nuevas actividades que surjan de las reuniones y debates iniciales con el propio colectivo.
El proyecto consiste en desarrollar actividades atractivas para los/las jóvenes en sus espacios de referencia (casa de la juventud) en las que se cuente con personal con experiencia en el área de discapacidad. Esta figura dinamizadora generará que la interrelación se de de manera natural, salvando los obstáculos iniciales previos que puedan surgir y realizando un acompañamiento tanto a los/las adolescentes con discapacidad que llegan nuevos como al resto de jóvenes y sus familias
Objetivos específicos del proyecto
- rear un espacio artístico inclusivo.
- rear sesiones deportivas inclusivas.
- Generar lugares de encuentro para jóvenes que sean inclusivos.